Este pueblo pequeño del Pirineo está bien situado, cerca de Jaca.
Tiene un encanto especial, muy acogedor por el trato con los clientes y sus alojamientos muy bien cuidados, con mucho gusto, económicos.
Un sitio para las familias con muchos rincones para entretenerse, y para los que les gusta disfrutar de la montaña, no hace falta irse mas lejos.